Elena estaba internada desde el jueves al mediodía en el Hospital DR. Ramón Madariaga de Posadas por haber presentado complicaciones respiratorias a raíz del coronavirus. El miércoles se había hecho el hisopado y el jueves a la mañana confirmó el resultado positivo y al tener complicaciones respiratorias la internaron; cuando ya no presentaba complicaciones que peligraran su vida fue dada de alta.
Al llegar a su casa en el Barrio Las Tacuaritas en Garupá, se encontró con que personas habían ingresado a su casa, forzaron la puerta de atrás, usaron la cocina, prepararon la comida de la heladera y al parecer, permanecieron varias horas adentro del domicilio ya que dejaron colillas de cigarrillo. También tomaron un vino que había en la casa, le robaron varios metros de cable de cobre y se llevaron el televisor.
Actualmente la enfermera cursa la enfermedad y debe permanecer aislada. Por ese motivo, se comunicó telefónicamente con la policía para hacer la denuncia de invasión de domicilio y hurto pero desde la sede policial no le quisieron tomar la denuncia.
La víctima afirmó que los ladrones son tres personas que ella conoce porque ya le habían robado en otras dos oportunidades. Incluso, minutos después de encontrarse con su casa desvalijada, la mamá de uno de ellos se comunicó telefónicamente para chantajearla y pedirle dinero a cambio de brindarle información sobre la ubicación del televisor. En el transcurso de la llamada telefónica, los tres sospechosos se hicieron presentes en su vivienda y reconocieron que habían entrado al domicilio ante su ausencia pero que no se llevaron nada.
Pese a todo lo que le tocó vivir, ella como personal de salud, teme que los ladrones se hayan infectado de coronavirus y contagien a otras personas del entorno familiar y se dispare el virus en la comunidad.