La mortandad de peces en un importante arroyo de Posadas que desagua en el río Paraná causó conmoción en la ciudad donde se iniciaron tareas de limpieza y el estudio de los peces para determinar la causa de su muerte. Hasta este lunes fueron retirados 300 kilos de peces que murieron envenenados.
En operativos en el tramo del arroyo entre las avenidas Rademacher y Lavalle se retiraron restos de la fauna ictícola y se tomaron muestras del agua a fin de determinar cuál fue el agente que causo la mortandad.
La Municipalidad de Posadas informó que se labró un acta de infracción a un vecino que habría arrojado al cauce un residuo contaminante.
Encontraron un agua amarillenta en la zona donde murieron los peces envenenados, en su mayoría bagres. La delegación municipal trabajó en la limpieza de la chacra ubicada en López Torres y Mariano Moreno.
La limpieza y estudio de la fauna ictícola envenenada se extenderá hasta la esquina de Tamareu y Lavalle, otro tramo por donde serpentea el arroyo Vicario antes de llegar al Paraná.
Javier De Lima, bioquímico y director del laboratorio de Bromatología de la municipalidad de Posadas, informó que la mortandad de peces fue detectada el sábado pasado por la tarde, en declaraciones a MisionesOnline.
Los vecinos se comunicaron con el delegado barrial de Villa Urquiza, quien avisó al área de Salud de Posadas. De Lima explicó que se pusieron a disposición tanto desde Bromatología como de la Secretaría de Medio Ambiente y asimismo desde el Ministerio de Ecología.
"Hicimos el muestreo y el agua era de un color amarillo intenso. Quiero destacar la labor de los vecinos ya que si no hubiesen avisado quizá hoy el líquido estaría depurando hacia el río Paraná", sostuvo el profesional en diálogo con radio Libertad.
Con respecto a la sustancia derramada, aseguró que se encuentran estudiando acerca de qué podría tratarse, aunque indicó que tienen algunas en mira. "Nosotros necesitamos tener una idea de qué solvente estamos buscando para luego iniciar un patrón de comparación", explicó.
La investigación, junto al delegado barrial, los llevó hasta un domicilio donde funcionaba un local de reparación de electrodomésticos. Afirmó que inspeccionaron el lugar pero no encontraron nada relacionado, sin embargo se mantienen las sospechas ya que "estaban deshaciéndose de las cosas que habían allí".
En cuanto a los peces muertos tras el derrame, De Lima mencionó que están trabajando con veterinarios que se desempeñan en el municipio y tomaron muestras de los mismos para realizar una autopsia y así continuar con las investigaciones.