“Está stand by esa reunión. Fue anunciada extraoficialmente, pero nunca convocada. Ni a la UIA ni a la CGT”. El dirigente sindical enrolado en la CGT, consultado por este medio, blanqueó después del mediodía de ayer que en la jornada no habría ningún encuentro entre Sergio Massa, cámaras empresariales y centrales sindicales.
“Seguimos sin novedades”, respondieron, en coincidencia con la CGT, desde el departamento de prensa de la Unión Industrial Argentina. Ni empresarios ni sindicalistas, tampoco el Gobierno, informó cuándo podría celebrarse la cumbre. El miércoles el presidente Alberto Fernández también aludió a una inminente convocatoria para lograr un acuerdo de precios y salarios por dos meses.
“Vamos a convocar el jueves de la semana que viene a entidades empresarias y de trabajadores a los efectos de asegurar un mecanismo que permita recuperar ingresos en trabajadores del sector privado, que incluye la mejora de las asignaciones familiares”, había sido el anuncio de Massa. En esa oportunidad habló de la necesidad de reforzar los salarios de entre “50 mil pesos y 150 mil”.
Los ruidos en la CGT empezaron ahí. Dos de los secretarios generales, Héctor Daer y Carlos Acuña, expresaron su rechazo a una idea que el ministro Massa no llegó a precisar: la posibilidad de impulsar un bono (o refuerzo) para los trabajadores privados.
“Para que se entienda bien: lo que hay que discutir es el 20% por encima del 60% de las paritarias si la inflación va a ser del 80%. Y este es el tema de fondo”, explicó Daer al sitio BAE Negocios.
“La posición mayoritaria de CGT es que las paritarias sean el instrumento para las mejoras salariales”, confirmó ayer a este diario otro dirigente cegetista. Entretanto, desde la propia CGT, Jorge Sola, su secretario de prensa, confirmaba a La Voz que seguían sin recibir ninguna invitación del gobierno.
Pablo Moyano, el secretario general que completa el triunvirato de la CGT, y sindicatos ligados a la Corriente Federal y al kirchnerismo, siguen opinando diferente al sector alineado con Daer y Acuña.
“La discusión paritaria es un tema absolutamente aparte; las sumas fijas o bonos no inciden en ellas”, ya dijo Pablo Moyano. El dirigente camionero (junto a otros sindicalistas) fue recibido en El Vaticano por el Papa Francisco. “Sin Moyano no se puede hacer una reunión”, deslizaron desde el Gobierno sobre la postergación de la convocatoria.
Massa anunció este miércoles un bono de $7.000, que se pagará en septiembre, en octubre y en noviembre, para las jubilaciones mínimas, que a partir de septiembre estarán por encima de los $50.000. Desde su ministerio, nadie ha precisado de cuánto sería el bono en estudio para los trabajadores, que tanta resistencia provocó en la CGT. Las versiones aluden a cifras que van de los 30 mil pesos a los 50 mil pesos. Una suma fija que levante los salarios más atrasados.
A la irresuelta discusión dentro del sindicalismo sobre “bono sí o no”, otro elemento pudo haber incidido en la postergación de la convocatoria a la UIA y a la CGT: este jueves se conoció la inflación de julio. Un apabullante 7,4%, el más alto en 20 años.
“El Gobierno analiza todas las medidas posibles”, se limitó a decir la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, sobre la posibilidad de impulsar un bono o refuerzo para los trabajadores. “Conozco el problema, no me desentiendo”, dijo ayer Alberto Fernández sobre la inflación, en un acto en Chaco, donde se entregaron viviendas.
Otra postergación fue la entrada en vigencia del nuevo esquema de subsidios al gas y la electricidad, que se había anunciado también para este jueves. Massa acaba de remplazar al Secretario de Energía, Darío Martínez, por Flavia Royón.
Sobre la segmentación, Massa ya definió que “quien menos consume o menos ingresos tiene, menos paga; quien más consume o más ingresos tiene, más paga”. La idea es que los subsidios para la luz alcancen un tope de consumo de 400 kw. Superado este límite, el resto consumido paga tarifa sin subsidio.
El Gobierno también espera apuntalar los ingresos, elevando el salario mínimo, hoy por encima de los $47.000. La reunión del Consejo del Salario Mínimo fue pasada del 18 de agosto al 22 de agosto. La UIA avisó que prefería esperar a su titular, Daniel Funes de Rioja, quien estará fuera del país antes de la nueva fecha pactada. La CGT, en tanto, se movilizará al Congreso el 17. Ese día se sabrá cuán alineada está la central obrera con las políticas ahora impulsadas por Sergio Massa.
Corresponsalía Buenos Aires.