La precandidata a presidenta por Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, padeció inconvenientes a la hora de sufragar este domingo en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) porque la máquina para emitir el voto electrónico, que se usa en la categoría de postulantes porteños, también falló como sucedió en otros puntos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La exministra de seguridad arribó pasadas las 12 del mediodía al predio de La Rural, en el barrio porteño de Palermo. Allí votó primero en papel y luego fue el turno de utilizar la máquina para votar de manera electrónica, donde comenzaron los problemas. “Tuve que votar ocho veces y tardé media hora”, se quejó en declaraciones a la prensa.
“La votación presidencial fue absolutamente tranquila, como siempre, y la votación en la Ciudad de Buenos Aires me falló la máquina, voté 7 veces, vinieron dos técnicos y después de tratar de votar 7 veces donde inclusive me pasaba una cosa muy rara porque yo votaba una lista y me salía otra lista, distinta, a la que no quería votar. Y tampoco imprimía la máquina, con lo cual lo que tuve que hacer fue esperar”, repasó la aspirante presidencial.
La referente del PRO destacó la asistencia del delegado electoral del Juzgado Federal y de la presidenta de mesa. “Los técnicos tuvieron que venir y por supuesto que vieron mi voto porque no hay manera de que trabajen sin que vean el voto. Y luego tuvieron que cambiar la máquina y ahí pude votar”, relató.
Seguido, Bullrich opinó que “los sistemas electorales tienen que tener un nivel de maduración, es decir, hay que probarlos, hay que trabajarlos durante un tiempo largo como para ver si efectivamente funcionan” y sentenció: “Mi experiencia personal fue mala”.
Consultada sobre las demoras en varios puntos de la Ciudad, Bullrich consideró que “si a muchísima gente” le pasa lo que le pasó a ella “tendrá que estar esperando en una cola y lo normal es votar en un ratito, tres minutos e irse”.
Más temprano, la jueza federal con competencia electoral en la Ciudad de Buenos Aires María Servini advirtió por los problemas para votar con las máquinas electrónicas y consideró que “resulta preocupante el grado de improvisación con que se han manejado tanto la empresa contratada para la provisión e instalación de las máquinas de votación, como el propio Instituto de Gestión Electoral” de CABA.