José Palma tenía 56 años cuando fue encontrado muerto en su domicilio de barrio Los Granados. La Policía de Córdoba fue quien halló el cadáver, luego de que su sobrino confesara que algo había ocurrido entre ellos en la noche del sábado 20. Fueron los vecinos de la zona quienes dieron algunas pistas a los investigadores de Homicidios para intentar comprender este crimen que involucraba a dos parientes y un asesinato.
El hombre, asesinado en su casa entre la noche del sábado 20 y el domingo 21 de este mes, era un emprendedor de la zona. Tuvo carnicería y otros negocios, pero se fundía porque a las ganancias la destinaba al vicio que lo tenía atrapado, siempre según los testimonios reunidos hasta ahora por La Voz.
Con regularidad, era visitado por un sobrino, Ignacio Serra (28), que solía quedarse a dormir en la misma casa de calle Julio Etchegaray al 4100. El muchacho, según se presume, es adicto a las drogas. Ésta sería una de las claves de los investigadores. Ya que, el domingo pasado el mediodía, Serra se despertó y se topó con marcas de sangre en distintos sectores de la vivienda y, en el living, el cadáver de su tío con una cuchilla clavada en la nuca.
Serra caminó hacia una comisaría y confesó a medias. Dijo, según consta en la investigación que lleva adelante el fiscal de Distrito 4 Turno 1, Horacio Vázquez, que ese sábado al anochecer él había discutido feo con su tío. Que había ingerido drogas y que le pedía dinero a Palma para poder salir esa noche. Y que cree que “algo” sucedió en aquella discusión, pero que no lo recordaba bien.
Agregó que salió a una fiesta y que volvió a la casa ya entrada la madrugada. Y que se acostó a dormir. Y que recién cuando se despertó ese domingo, se dio cuenta de que su tío estaba muerto, que tenía una cuchilla clavada en la cabeza y que había demasiada sangre derramada dentro de la vivienda.
El joven de inmediato quedó detenido, acusado por el homicidio. El fiscal ordenó, entre otras medidas, un peritaje psiquiátrico.
Los peritos de la Policía Judicial y los detectives de la división Homicidios fueron hasta la vivienda, levantaron el cadáver e inspeccionaron la escena del crimen. Los peritos forenses contabilizaron 18 heridas de arma blanca en el cuerpo de Palma. Una saña que ahora los investigadores están intentando explicar.