“Esto es para el torro (sic) de Esteban Alvarado ¡Feliz año nuevo!”, decía la nota que encontró la policía tras un feroz ataque a balazos con un homicidio en el barrio Cabín 9. El caso denunciado hace más de dos meses se convirtió este lunes en un doble crimen, ya falleció el sobrino de la primera persona asesinada cerca del límite de Pérez y Rosario.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) confirmó la muerte de Franco Damián Miño por la emboscada registrada en el cruce de El Jacarandá y Hudson. Estaba internado en estado grave desde el martes 27 de diciembre de 2022 en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).
La balacera ocurrió a la tarde en Cabín 9 y terminó en el acto con la vida de Sergio Ramón Paiva (46). En cambio, a su sobrino lo llevaron hasta el Policlínico San Martín para que recibiera asistencia médica.
Tras su ingreso al centro de salud municipal, Miño fue derivado al Heca por heridas de arma de fuego graves. Desde entonces no se reportaron personas detenidas ni imputadas por el asesinato de su tío en Pérez.
Aunque parte de la evidencia y los indicios sobre el ataque permanecieron bajo reserva, la nota dirigida a Esteban Alvarado no tardó en trascender. A partir de este mensaje, se instaló la sospecha de un doble crimen vinculado a una disputa por la venta de drogas al sudoeste de Rosario.
¿Cómo fue el doble crimen en el que dejaron un mensaje mafioso para Esteban Alvarado?
Según la denuncia que recibió el fiscal Gastón Ávila, Paiva y su sobrino fueron víctimas de un ataque perpetrado por varias personas. La principal hipótesis es que los delincuentes les dispararon frente a su casa y luego huyeron sin ser identificados.
Fuentes policiales precisaron que los asesinos utilizaron varios vehículos. Tres personas pasaron a bordo de un Chevrolet Corsa gris y otros utilizaron dos motocicletas.
En total, los investigadores recogieron una decena de vainas servidas como huella del doble crimen. Tres de ellas corresponden a proyectiles 9 milímetros y las restantes son de calibre 45.