En Godoy Cruz ya funciona el Canasto Sustentable de Botellas de Amor

El nuevo recipiente se encuentra en el Parque San Vicente y es el primero fabricado con postes plásticos hechos a base de botellas de amor entregadas por los vecinos.

En Godoy Cruz ya funciona el Canasto Sustentable de Botellas de Amor
Godoy Cruz cuenta con el Primer Canasto Sustentable de Botellas de Amor.

Un Canasto Sustentable de Botellas de Amor ya funciona en el Parque San Vicente de Godoy Cruz. El recipiente fue fabricado por los vecinos.

Desde junio a diciembre del 2020, se recolectaron 17.000 kilos de botellas de amor. Este número demuestra la creciente conciencia ambiental de las personas que lo incorporaron en sus pautas de consumo y hábitos en casa.

“La fabricación de este nuevo canasto es resultado de un círculo virtuoso sustentable, en el cual los vecinos son los principales protagonistas, ya que sumaron en sus hogares la costumbre de rellenar botellas con plásticos de un solo uso. Siendo así, un proceso de trabajo entre los vecinos, las voluntarias de Botellas de Amor, la Municipalidad y Maderas Plásticas Mendoza” expresó Diego Coronel, secretario de Obras y Servicios Públicos.

Además de este nuevo punto, ubicado en Mosconi casi El Nihuil del Parque San Vicente, se encuentran disponibles dos canastos más, uno en el Parque Benegas y el otro en la intersección de ciclovía y calle Pellegrini.

¿Cómo se arman?

Se debe rellenar cualquier envase PET (botella de gaseosa, envase de shampoo, etc), con residuos plásticos: bolsas, paquetes de fideos, arroz, polenta, galletitas, envoltorios de golosinas.

Es importante que los materiales estén limpios y secos, y se debe ir compactando hasta que esté completamente dura. De esta manera, se facilita el transporte y la pérdida accidental de basura.

¿Qué no se puede colocar?

  • Telgopor, papel, cartón, aluminio, látex, globos, metal, arena, tierra, esponjas o goma eva.

¿Cómo se procesan?

Las botellas son recolectadas por la Comuna y trasladadas a la Planta de Maderas Plásticas Mendoza, ubicada en Junín. Un porcentaje de las botellas vuelven, en contraprestación, convertidas en postes plásticos, con la finalidad de utilizarse en espacios públicos o en cualquier otra acción que sean requeridos.