Un grupo de médicos y profesionales de la salud de Mendoza se ha organizado en contra de la ley que apunta a legalizar la interrupción del embarazo, con media sanción en el Congreso.
Si bien el proyecto plantea la posibilidad de que los profesionales médicos puedan identificarse como objetores de conciencia, lo que implicaría que se excusen de practicar el aborto, la iniciativa obliga a los efectores de salud públicos a que garanticen sin excepciones la práctica (siempre y cuando sea antes de la semana 14 de gestación).
Ante esta situación, médicos y profesionales mendocinos adelantaron que en caso de que se sancione la ley; habrá una "catarata" de pedidos de inconstitucionalidad. De hecho, sostienen haber juntado mil firmas de colegas en contra al proyecto.
"Los científicos coinciden en que la vida comienza desde la concepción. Todo lo que vaya en contra de eso por vía artificial es crimen. Lo que se está proponiendo en este momento es un genocidio", destacó a su turno el médico Raúl Soler Ponce.
Fuente: Diario Los Andes