Cada 2 de abril, en nuestro país, se conmemora el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas. Esa, fue la fecha elegida por los altos mandos militares para desembarcar en las Islas, con un único objetivo: recuperar la soberanía sobre el territorio ocupado por Gran Bretaña en 1833.
El conflicto bélico con la potencia anglosajona, dejó un saldo de 649 soldados muertos, 500 suicidios (con secuelas y traumas pos guerra) y 1300 heridos.
Distintas ciudades del país, honraran a los que ya no están y a los que, a pesar de las heridas, siguen apostando al día a día y Marcos Juárez no será la excepción, ya que cuenta con sus 23 héroes: Gabriel Massei, Aníbal Zanatto, José Pérez, Elso Juárez, Alberto Ballini, Carlos Torres, Ariel Chiachera, Miguel Gonzales, Carlos Mercado, Claudio Gómez, Ernesto Picchio, Horacio Esterniolo, Hugo Alzuaga, Juan Bortol, Gustavo Fava, Horacio Tello, Walter Bravin, Claudio Mirenda, Marcelo Ceballos, Santiago Abraham, Sergio Fazzi, Carlos Brion y Carlos Bertello.
Algunos de ellos, brindaron su testimonio al Prof. en Historia, Héctor Decándido, quien lo plasmó en la publicación "35 años del Conflicto", editada en el año 2017.
A continuación, hacemos eco de algunas experiencias:
Horacio Esterniolo: "(...) Fue una experiencia inolvidable, que voy a llevar de por vida. No me arrepiento de haber servido a la patria en una causa que creo justa. También sostengo, que no fue la forma de reclamarlas".
Aníbal Zanatto: "(...) Muy orgullosos de haber servido a mi patria, defender nuestra bandera, verla en lo alto del mástil es un sentimiento, un orgullo (...)".
Marcelo Ceballos: "(...) Aquel acontecimiento marcó mi vida de una forma, podía decirse a veces dolorosa y otra veces, como que fue algo necesario y que yo tenia que estar allí. Una cosa es muy cierta, la guerra es lo último al que el ser humano tendría que apelar para dirimir sus experiencias (...)".
Elso Ramón Juárez: "(...) A los18 años empezó una nueva etapa en mi vida, mi experiencia en la guerra, durante la cual hubo momentos feos y muy sacrificados y me encontré con cosas que no creí que ver en mi vida, pero siempre sabiendo que lo hacía por mi Argentina".
Horacio Roberto Tello: "(...) Llevamos una carga a cuesta desde 1982 y mientras vivamos. Esta carga está compuesta por estallidos de bombas, tiros de fusil, tableteo de ametralladora, rugir de aviones en vuelos rasantes, gritos de heridos pidiendo ayuda y todas las experiencias que quedan despues de haber vivido una guerra. A esto hay que sumarle la post guerra. No estamos locos, sí heridos en el alma".
