Un organización acusada de realizar maniobras de evasión impositiva, lavado de activos y contrabando de exportación de productos de mar hacia países limítrofes como Brasil y Uruguay y hacia China fue desbaratada en Mar del Plata.
La desarticulación de esta banda, cuyos cabecillas eran de origen chino, se llevó a cabo en el marco de una operación denominada "Frutos de Mar", que incluyó 16 allanamientos realizados ayer en la localidad balnearia y en la ciudad de Buenos Aires, en los que participó personal de la Policía Federal (PFA), AFIP, Aduanas y la DGI.
Según informaron fuentes policiales, los miembros de esta firma "habían evadido al fisco más de 23 millones de dólares, entre 2017 y 2019".
La investigación para detectar los movimientos de esta banda se inició a partir de una denuncia de la AFIP, que descubrió que una organización pesquera realizaba operaciones internas y de comercio exterior entre sí y con terceros, con subfacturación de sus transacciones.
"Básicamente, el producto de la pesca era exportado a valores por debajo del real, de manera de tributar menos dinero en nuestro país. A la maniobra se le sumaba una subfacturación a empresas que ellos mismos habían creado, evadiendo importantes sumas de dinero en sus ganancias", explicó una fuente.
A partir de esa información, el Departamento de Investigaciones Federales de la PFA determinó que la organización estaba compuesta por al menos seis empresas en Argentina, que a través de su actividad pesquera exportaban por menor valor a Brasil y triangulaban comercialmente con dos empresas ubicadas en Uruguay.
Según se estableció, las empresas en suelo uruguayo "eran propiedad de los mismos empresarios que integraban esta organización en Argentina", y finalmente, "la maniobra culminaba con la exportación de la mercadería desde allí hacia al menos una empresa en China, siendo este el lugar final de destino".
En ese sentido, se determinó que los dueños de estas empresas en China eran accionistas de las firmas con residencia en Argentina, las cuales inyectaban capital a su vez a través de transferencias bancarias y préstamos, generándose así el retorno de las ganancias de la evasión tributaria.
Los allanamientos que permitieron desbaratar esta organización fueron ordenados por el titular del Juzgado Federal 3 marplatense, Santiago Inchausti.
En los procedimientos fueron secuestrados unas 150 cajas con documentación y dispositivos informáticos, alrededor de 2 millones de pesos, y distintas cantidades de dólares estadounidenses y de Hong Kong, yenes, reales, guaraníes, y pesos uruguayos, mexicanos y chilenos.