El juicio oral y público de la causa denominada "Pibes Villeros", que investiga el presunto desvío de fondos públicos que debían ser destinados a la construcción de viviendas en Jujuy comenzó a transitar la etapa de alegatos con la exposición de una de los representantes de Ministerio Público de la Acusación.
El Tribunal Oral en lo Criminal 3 escuchó la primera parte de exposición de la fiscal Delia Filomena Ortiz, en la audiencia que comenzó poco después de las 18:30 en el Salón Vélez Sarsfield del Palacio de Tribunales.
Al iniciar su alegato Ortiz procuró describir los lugares, tiempos y circunstancias en las que la organización Tupac Amaru y la Red de Organizaciones Sociales, lideradas por la dirigente social Milagro Sala, "pergeñaron un plan estratégico que se convirtió en una asociación ilícita".
La causa tiene imputadas a 31 personas -excooperativistas y exfuncionarios provinciales-, por supuesta defraudación al Estado, de unos 60 millones de pesos, presuntamente cobrados por cooperativas para construir viviendas sociales que, según la Fiscalía, "no fueron ejecutadas".
Sostuvo que conforme a las pruebas producidas y de acuerdo a la requisitoria fiscal "todos los hechos convergen y se da por acreditada la responsabilidad de la jefa de la asociación ilícita en la persona de Milagro Sala".
Más adelante contextualizó que el nacimiento de colectivos sociales se dio luego de la crisis del año 2001, por lo que determinó que "el Estado confió en organizaciones sociales para tareas de contención como copas de leche, roperos y capacitaciones educativas".
En ese sentido sostuvo que las cooperativas "pedían trabajo y presionaban al Gobierno provincial y a los municipios" para que se les entregue tierras y así conseguir la realización de diversas obras en barrios de la capital jujeña y localidades del interior.
La acusación basada en testimonios puntuales desarrollados en el debate se enmarca en el plan de viviendas impulsado por el Gobierno nacional llamado "Mejor Vivir 2", para el cual "se conformaron cooperativas regulares y otras ficticias", dijo la fiscal Ortiz.
Describió que el "núcleo duro" de Milagro Sala estaba comprendido por Raúl Noro, Marcia Sagardía y Mabel Balconte, a quienes luego se sumaron Mirtha Guerrero y Mirta Aizama (todos imputados en esta causa), encargados de manejar "el endoso de cheques y cobrar los mismos".
Hacia las 19 la audiencia se vio interrumpida cuando el esposo de Milagro Sala, Raúl Noro, quien padece diversas dolencias, debió ser atendido por personal del SAME, que lo estabilizaron y determinaron que siga el debate en una sala contigua.
Para después de la exposición de Ortiz se esperaba la continuidad del alegato de acusación por parte de los otros dos representantes de la fiscalía, Liliana Fernández de Montiel y Diego Cussel.
Durante el juicio que se inició el pasado 23 de julio declararon 103 testigos, y luego de los alegatos de la fiscalía expondrá la querella conformada por los representantes de la Fiscalía de Estado y la Fiscalía Anticorrupción.
