El drástico anuncio de que volvería a paralizar el servicio de transporte urbano e interurbana de pasajeros, le redituó a la UTA Jujuy en que puso nuevamente en el tapete una serie de reclamos de índole gremial y salarial, ya que al aviso de que este martes los choferes harían paro por 24 horas, el Gobierno provincial le cruzó el recurso de dictar la conciliación obligatoria, lo que neutralizó el intento de huelga.
Si bien la semana pasada la dirigencia de la seccional Jujuy de la Unión Traviarios Automotor (UTA) ya había dejado entrever sus intenciones al comunicar que los trabajadores serían convocados a asambleas en sus respectivas empresas, la decisión de ir al paro se hizo púbica el lunes por la tarde y así disparó la frenética carrera de empresarios y autoridades para evitar la medida.
Según la conducción sindical, además de reclamar el pago de los salarios de septiembre "en tiempo y forma", el paro tenía como argumento añadido el rechazo a las medidas disciplinarias que estarían aplicando algunas de las empresas a sus trabajadores, que más allá de la severidad de las mismas, se trataría del impacto económico en los salarios, ya que suspensiones por llegadas tarde a tomar servicio implicarían descuentos de hasta 8.000 pesos en las liquidaciones mensuales.
Como se dijo, dictada la conciliación obligatoria a última hora de la tarde del lunes, los trabajadores de las empresas concesionarias del servicio iniciaron con normalidad sus tareas este martes al tomar el primer turno a las cinco de la mañana y hasta el momento no se registra inconvenientes en la circulación de las unidades en San Salvador de Jujuy alrededores.
El ministro de Trabajo, Jorge Cabana Fusz, dijo que sindicato y empresarios fueron citados para el viernes próximo a un reunión en la que se analizará la situación en lo que respecta a la cancelación de los salarios adeudados y demás compromisos contraídos entre las partes.