El terminó “ghosting” comenzó por las comunicaciones cotidianas en medios como WhatsApp y aunque tiene muchas formas para llamarlo, la más común en Argentina es “clavar el visto”. Poco a poco su significado se ha ido extendiendo dependiendo del contexto y ha tocado en los profesionales.
En el contexto en español el “ghosting” hace referencia a “dejar en visto” a alguien, no responder más y simplemente desaparecer. En las formas de utilizarlo, era conocido por los profesionales cuando iban a una entrevista de trabajo luego de escuchar la frase “nosotros te llamamos” y no recibir ninguna llamada posterior a ello. Según un informe de The Greenhouse al menos el 75% de los postulantes vivió esta experiencia.
Sin embargo, un informe de Indeed señaló que la situación está teniendo un reverso. De acuerdo al sitio de web de búsqueda de empleo, estos últimos dos años el 77% de las personas que fueron contactadas después de una entrevista laboral, le clavaron el visto a las empresas o reclutadores.
El nuevo “ghosting” que se había hecho común en la selección por parte de las empresas, es ahora más común del lado de los candidatos. Según Indeed, desde el año 2019 el 79% de las compañías dejaban de responder a las personas que habían descartado, algo que cambió en menos de cinco años.
Mediante el mismo informe la bolsa laboral online, explicó que el porcentaje de candidatos que dejaron de responder a las posibles ofertas de empresas era del 18% en el año 2018, aumentó a 28% en 2019 y ahora, tres años después, se ubicó en un más de 75%.
El porcentaje evaluado por Indeed, reveló que las empresas encuestadas frente a este tipo de “ghosting”, señalaron que se había vuelto habitual que los candidatos luego de recibir una llamada de Recursos Humanos o asistir a una entrevista, no contestaran más. Una cuarta parte de esta compañías, destacó que algunas personas aceptaron el puesto y nunca se presentaron al trabajo.
Qué dicen los postulantes sobre el ghosting laboral
En una encuesta de Vía País a personas en países como Argentina, Colombia y Venezuela, que han postulado en varias ocasiones a empleos coincidieron que su respuesta o falta de ella fue por no estar de acuerdo con la oferta laboral de la empresa.
Francisco Lanau, residente en la provincia de San Luis, Argentina, destacó que en una ocasión asistió a una entrevista en el rubro de gastronomía y “todo bien”, pero luego le pidieron que hiciera una semana de prueba sin cobrar y esto lo llevó a hacerles ghosting. “Llegué a casa, me llamaron y no les atendí. Los bloqueé y no les escribí más nunca”, explicó el joven de 27 años.
Olga Ron, inmigrante en Colombia, expresó que su primera experiencia haciendo “ghosting” fue por su desespero de encontrar trabajo y ahorrar dinero en impresiones porque estaba “recién llegada”. La joven de 28 años con conocimientos en redes sociales y también floristería, optó por postularse a una tienda de flores donde le solicitaron “que en sus ratos libres acomodara las redes”, por lo que Ron decidió dejarlos en visto tras una primera entrevista.
Pierina Brancato, quien se mudó hace un año a la capital de Venezuela, contó su experiencia buscando trabajo en un comercio de licores. Su respuesta del “ghosting” se dio luego de una primera entrevista en donde la reclutadora se encantó con su experiencia, pero le ofreció un pago muy bajo. “Ella me llamaba y no le contesté más nunca”, señaló.
Entre las personas encuestas, uno de los candidatos que se desempeña en E-commerce, Teo Marval, resaltó que nunca ha hecho “ghosting” a una empresa, porque lo considera una manera de “hacer perder tiempo a la gente”. El treintañero que reside en la Ciudad de Buenos Aires señaló que le parece mejor dar una respuesta así sea “Chau y gracias por la oportunidad”.