Las abogadas de la joven que denunció al sacerdote Raúl Anatolly Sidders, solicitaron la prohibición de salida del país del hombre, debido a su cercanía con la Triple Frontera. La exalumna del colegio San Vicente de Paul de La Plata, lo denunció por supuesto abuso sexual, y ahora teme por “un riesgo de fuga”.
La llegada del sacerdote al municipio, fue cuestionada por movimientos de mujeres, ante las denuncias de abuso de autoridad y abuso sexual que apuntan contra el hombre. Actualmente permanece en la Diócesis de Iguazú, donde llegó trasladado desde el Arzobispado de La Plata en el mes de mayo pasado e inresó como capellán del Escuadrón XIII de Gendarmería Nacional.
El pedido fue realizado fundamentando que “Sidders actualmente se encuentra sin función alguna y desconociéndose bajo qué autoridad en Puerto Iguazú, es decir en la Triple Frontera, conocido trifinio internacional situado en el cruce de fronteras entre Argentina, Brasil y Paraguay que comunican la localidad misionera con Foz de Iguazú en territorio brasileño y las ciudades paraguayas de Presidente Franco y Ciudad del Este”.