Este sábado, Gustavo Quevedo de 19 años, que trabaja de changarín y vive en Colonia Itatí de Comandante Andresito, regresaba en moto a su chacra acompañado por un amigo, Daniel Antúnez, después de comprar carne para su familia en un negocio cercano. Fueron detenidos por un grupo de integrantes de la División Infantería de Zona Norte, montados en cuatro motos de alta cilindrada.
Le pidieron que bajen y después de maltratarlos y hostigarlos para que hagan flexiones; dejaron ir a Antúnez, mientras que a Quevedo le hicieron varias preguntas y ante sus repuestas, lo trataban de mentiroso burlándose del trabajador.
Fue obligado a trasladar su moto hasta el Paraje Deseado, dentro de la localidad de Andresito, mientras le pegaban latigazos, amenazándolo con que si intentaba escapar le iban a disparar con el arma reglamentaria.
Al llegar al destacamento policial de Deseado, volvieron a golpear a Quevedo, le sustrajeron su moto sin labrar ningún acta, y le ordenaron que regrese “calladito” caminando -a pesar de estar muy lastimado- hasta su casa de la Colonia Itatí, distante a más de 13 kilómetros de Deseado.
"Yo volvía de comprar carne con un amigo, en la motito que uso para trabajar en la chacra, cuando me pararon los policías de Infantería. Les expliqué que no estábamos de paseo, sino que salimos a hacer las compras, tenía la bolsita da carne debajo del asiento de la moto; pero no me creyeron y se burlaban de nosotros", señaló Quevedo.
