La fiesta de los futbolistas de la Selección Argentina llegó también a Entre Ríos ya que el Nº 25, Lisandro “Licha” Martínez viajó para celebrar en su ciudad natal. La ciudad de Gualeguay se vistió de fiesta para recibir al futbolista entrerriano tras la conquista del Mundial de Qatar 2022.
El futbolista del Manchester United no pudo evitar las lágrimas cuando parado en escenario le mostraron un video con los mejores momentos de su participación en Qatar en la Copa del Mundo.
Con un público que lo quería escuchar, Lisandro que llegó acompañado de sus padres y su novia, se dirigió al público; “Estoy muy emocionado, ver a los niños para mi es una felicidad enorme”, y se puso a cantar junto a su pueblo: “Dale campeón...Dale Campeón”. Seguidamente, Licha recordó Gualeguay, “Donde yo me inicie, en Urquiza, en Libertad. El fútbol que viví acá, del que me llevo muchos recuerdos. Además de la maravillosa gente. Estoy muy feliz de poder venir acá a cerrar los festejos en mi casa. Estoy muy feliz con mi gente, venir acá para mi es lo más”.
Lisandro Martínez el único entrerriano en levantar la Copa del Mundo 2022
Sobre su participación junto al seleccionado de Scaloni, el delantero dijo que, “Una emoción enorme y un orgullo de poder estar ahí. Era mi primer Mundial, pero también estaba muy enfocado desde el principio, con el objetivo de salir campeón”. Asimismo Lisandro hizo referencia al partido frente a México: “Hablamos con los chicos sobre la derrota y lo bueno que tuvimos la humildad necesaria para aceptarla la derrota y hacernos más fuertes a través de ella”.
Lisandro Martínez declarado Ciudadano Ilustre de la ciudad de Gualeguay dijo: “fuimos de menos a más y la gente se identificó mucho con nuestro juego, mostramos buen fútbol y eso es lo que nos caracteriza a los argentinos”.
El joven entrerriano de 24 años de edad también se refirió a octavos de final ante Australia: “Uno tiene que estar predispuesto y cuando uno ve la camiseta, el escudo y tantos millones de argentinos atrás uno tiene que dejar la vida por todos ellos. Lo mínimo que podemos hacer es eso. Todos éramos un equipo. No sólo los jugadores, sino toda la gente que se identificaba con todos nosotros. Hasta los jugadores de los otros países hablaban de la fuerza que teníamos.
Sobre el juego del equipo, Martínez dijo que “No salíamos a jugar solamente nosotros, salía el chico que recién arranca en el fútbol, aquella madre, padre, aquel tío o abuelo. Era salir con una fuerza extranormal. Salíamos a ganar o a ganar”.
Finalmente Lisandro Martínez se refirió a su gente, -los gualeyos presentes-: “Uno se pone el doble de feliz cuando ves a toda esta gente. Para nosotros sacarle una sonrisa a los argentinos es un orgullo enorme y ojalá que todo esto pueda servir para que podamos estar con unión, que se termine la violencia y todo lo malo. Que nos podamos abrazar más, que podamos estar todos juntos, que nos emocionemos y disfrutemos de esta maravilla”.