Antenas telefónicas: avanza el proyecto de la UNER sobre su impacto en la salud

Funcionarios municipales en el marco de un plan iniciado para regular las antenas en la ciudad.

Antenas telefónicas: avanza el proyecto de la UNER sobre su impacto en la salud
Funcionarios reunidos con UNER\nCrédito: MDG

Este martes 18 de julio, se concretó un encuentro donde participaron diferentes áreas municipales, en la que se convocó a Esteban Rossi, bioingeniero de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), que dirige un proyecto sobre las antenas de celulares y su impacto en la salud.

"Desde la Municipalidad estamos encarando un ordenamiento integral de las antenas de la ciudad, y en ese sentido estamos manteniendo encuentros con diferentes grupos y personas" explicó Susana Villamonte, directora de Ambiente de la Municipalidad.

Funcionarios reunidos con UNER
Crédito: MDG
Funcionarios reunidos con UNER Crédito: MDG

"Junto con Rossi se trabaja para encarar un trabajo conjunto donde, conjuntamente con los vecinos, organizaciones no gubernamentales, sectores gubernamentales, científicos y académicos, desarrollen distintas herramientas para que todos estos actores y la población en general, puedan apropiarse de la más reciente y completa información científica disponible a nivel mundial en relación a los campos electromagnéticos y su impacto en la salud humana.

El empoderamiento de la sociedad para la reflexión, la toma de decisiones y la acción responsable en base a la información y la evidencia científica es el valioso aporte que el proyecto pretende generar".

La Organización Mundial de la Salud en 2011, a partir del informe 102 de la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC -en inglés-), ha clasificado los campos electromagnéticos de radiofrecuencia como posibles carcinógenos para los seres humanos (Grupo 2B), basado en un mayor riesgo de glioma, un tipo de cáncer cerebral maligno, asociado con el uso de teléfonos móviles. También existe científicos reconocidos a nivel mundial por la rigurosidad de sus investigaciones como el Lennart Hardell, Alexander Lerchl y el Thomas Tillmann, que están recomendando a la IARC subir la clasificación de riesgo a 2A o 1 para la telefonía móvil.