La defensa de María Ovando, la mujer que recibió una condena de 20 años de prisión por los abusos sexuales que sufrieron su hija y una nieta, presentó un pedido de excarcelación para que la condenada espere, en libertad, que la sentencia quede firme.
La justicia condenó a la mujer por los delitos de "abuso sexual con acceso carnal calificado por la preexistencia de vínculo y convivencia, abusos calificado por el vínculo y por ser menores de 13 años las víctimas y corrupción de menores".
Tras la sentencia, María Ovando, fue detenida inmediatamente y trasladada hasta la Alcaidía de Mujeres en Posadas, donde comenzó a cumplir la pena. "La prisión es infundada porque llegó al juicio oral en libertad, cumpliendo estrictamente a los llamados de la Justicia, y no se acreditó que exista peligro de fuga", argumentaron sus abogados en el pedido extraordinario.
En el mismo juicio también fueron condenados Marcos Iván Laurindo, a 18 años de prisión por los delitos de "abuso sexual con acceso carnal, con conocimiento de la convivencia preexistente en concurso real, reiterado, un hecho y abuso sexual y promoción a la corrupción de menores" y Lucas Ferreyra a 12 años de prisión, por "abuso sexual con acceso carnal, un hecho y abuso sexual gravemente ultrajante, un hecho".
