Boca y Racing, además de ser un clásico histórico, potenciaron esa rivalidad en los últimos año y de por sí era uno de los partidos más atractivos de la cuarta fecha del Torneo Clausura. Sumado a la crisis que afronta el Xeneize, y las urgencias en la Bombonera. Fue empate 1 a 1, con algo de alivio para los dirigidos por Miguel Russo que acumulan ocho partidos sin victorias. El peor arranque del ciclo de un DT en la historia del club.
Boca necesitaba ganar, y lo terminó empatando con mucho esfuerzo. Acallando en parte los reclamos y reproches que bajaban desde las tribunas en la Bombonera. Aunque está claro que no es suficiente.
En el segundo tiempo, cuando el Xeneize era el mejor y había dilapidado situaciones netas, una por Edinson Cavani, y dos por Miguel Merentiel, llegó la apertura del marcador cuando Solari la desvió en el camino dentro del área. Gol de Racing y el “movete, movete”, que no tardó en escucharse en la Bombonera.
Boca, en medio del nerviosismo, debió jugar con tra el rival, el reloj y el descontento del público. Porque Russo no acertaba en los cambios. Hasta que encontró el empate en un tiro libre perfecto de Leandro Paredes que cabeceó a la red Milton Giménez, a dos minutos del final del tiempo reglamentario. Y algo de paz para el Mundo Boca.
El presente de Boca y Racing
El Xeneize está atravesando la racha sin victorias (11) más larga de toda su historia y las eliminaciones en todas las competencias que disputó, hicieron que el 2025 sea uno de los peores años futbolísticos en toda la historia del club. Por el campeonato todavía no pudo ganar: 2 empates y una derrota.

Por el otro lado, La Academia llega de ganar en Copa Argentina frente a Riestra, pero su andar en el Clausura también es malo. Dos derrotas y una sola victoria. Sin embargo, los dirigidos por Gustavo Costas tienen los octavos de final de Copa Libertadores en la semana entrante, el gran objetivo del semestre, y por el cual el torneo local queda un poco de lado.