A dos semanas de la caída de un puente sobre la Ruta 14 por las intensas lluvias que afectaron a toda la provincia, miles de personas continúan aisladas.
En San Isidro están afectadas unas tres mil familias, mientras que en Pueblo Libertador hay otras veinte que aún siguen en situación delicada.
A pesar de que el nivel del agua ha comenzado a bajar, el daño en los caminos persiste. Por tal razón, este miércoles llegarían los materiales para la construcción de un puente Bailey que conecte a los habitantes del paraje Stella Maris con la parte urbana de la localidad.
"En la zona de Pago Redondo sobre la Ruta 54 ya se puede pasar por las obras, pero en la parte del paraje Stella Maris todavía están aislados", expresó Vilma Ojeda, la intendenta de San Isidro, en diálogo con Época. "Esta semana deberían llegar los materiales para la construcción del Bailey y está el compromiso de hacer un alcantarillado para la Ruta 14", añadió.
Según fuentes oficiales, la construcción de la estructura provisoria demoraría unos 15 días, dependiendo del estado del suelo y del tiempo.
Mientras tanto, la Policía y Prefectura continúan brindando asistencia a la población, proveyendo de alimentos y otros elementos de primera necesidad que transportan a través de lanchas.