Durante todo el fin de semana se sucedieron diversas fiestas clandestinas en todo el territorio de la provincia de Corrientes, el clima y la poca preocupación por las consecuencias que pueden acarrear el coronavirus puede ser el punto de encuentro para que esto se replicara en gran parte de la provincia.
En la Capital de Corrientes se clausuraron ocho bares, por exceso de personas. Pero también fueron múltiples las denuncias de fiestas y lugares que tenían más personas que las permitidas para este momento de pandemia.
Uno de los hechos más llamativos se detectó en Sauce, donde se denunció una fiesta clandestina con 62 personas en una propiedad ubicada en pleno centro. Los efectivos recibieron un llamado informando que se realizaba el evento y al llegar halaron a menores de edad entre los concurrentes. Lo llamativo es que la fiscalía ordenó que no se realice ninguna causa.
También en Mburucuyá se sucedieron un par de casos llamativos, picadas callejeras en una zona cercana al basural municipal fue denunciado y constatado por la policía de la provincia. En el lugar se demoraron a nueve personas.
En Santa Rosa se desbarató una fiesta clandestina con treinta personas en la misma y en Itatí otras 49 personas fueron demoradas por el mismo motivo.