El Poder Judicial de Corrientes dispuso la cesación de la actividad generada de daño ambiental colectivo, causado por una fábrica de curtido y terminación de cueros, cuya actividad ya había sido suspendida preventivamente.
Esta determinación fue firmada por el titular del Juzgado Civil y Comercial de Mercedes el doctor Gustavo Buffil. La causa fue iniciada por la Fiscalía de Investigación Rural y Ambiental de Mercedes contra el propietario de la fábrica, situada en Ruta Nacional 123.
Los informes periciales realizados dieron cuenta de la presencia de sustancias peligrosas tanto en el suelo como en el agua, en niveles nocivos para la salud tanto de los vecinos de la planta como para los propios trabajadores de la empresa, la plora y la fauna.
Se constató que el funcionamiento del establecimiento no contaba ni con autorización de la autoridad competente, ni habilitación para el manejo de sustancias químicas.