Podría decirse que es el piquete de uno solo, un caso inédito y extremo en el largo historial de manifestaciones en la que un vecino de Córdoba tomó una silla y se sentó en el medio del puente Alvear, aun bajo la lluvia, para expresar su malestar por los ruidos de los boliches y clubes de la zona.
Su presencia no pasó inadvertida, cuando a primera hora de este viernes, el vecino se instaló en el puente, con un paraguas para protegerse de la lluvia y sin preocuparse por el tránsito vehicular, mientras que un móvil policial se apostó a metros del lugar de la singular protesta.
Desde su silla y bajo el paraguas, el hombre comentó: “Desde las 2 de la mañana estoy protestando por los ruidos. No podemos vivir acá en la zona del ex Mercado de Abasto por los boliches, los bares y la corrupción de los controles de la Municipalidad”, denunció a Cadena 3.
“Pedimos a las autoridades municipales, nos prometieron que iban a hacer algo, nos mandaron su teléfono, les grabamos mensajes. Los boliches hacen bailes a puertas abiertas pero no nos contestan nada y nos bloquean”, concluyó.