Tras haber sido picado por un alacrán que habrían llevado sus compañeros al aula, el niño fue cambiado a otra escuela de Córdoba y su madre denuncia que no las autoridades escolares no lo cuidaron ni atendieron sus pedidos de protección ante el acoso que sufría.
Sobre el episodio, que pudo haber tenido consecuencias aun más graves, la mamá relató: “Mi hijo sintió la picadura y no pudo moverse. Se descompuso y empezó a vomitar”, narró a El Doce.
Pasado ya un mes de aquel día, el niño ya está en un nuevo colegio, al que llegó por decisión familiar: “Como mamá no me sentía segura de dejar a mi hijo allí”, comentó y recordó que el niño ya no quería seguir asistiendo a ese establecimiento.
Luego, cargó las tintas contra las autoridades educativas y denunció que “nunca admitieron que fue un caso de bullying”, a la vez que reclamó que “hubo descuido hacia mi hijo, que siempre se lamenta de lo que sucedió y se acuerda de momentos feos que pasó en el colegio”, comentó.
Por último la madre lamentó que lo sucedido haya dejado marcas que todavía están presentes porque su niño “tiene constantemente cambios de humor. Él mismo se dice que es gordo, lamentablemente”, dijo.