En coautoría con Adriana Galafassi, Mariano Bergés ha publicado recientemente el libro Acá no pasa nada, una mirada aguda sobre la corrupción del sistema judicial argentino "contada desde adentro", según el subtítulo de la obra.
El libro es publicado por editorial Bärenhaus y plantea algunas preguntas como estas: ¿Qué pasa con la Justicia argentina? ¿Por qué no se investiga a fondo? ¿Qué se esconde detrás de los procesos mal tramitados y sin resultados? ¿Por qué se demoran las causas contra los funcionarios públicos? ¿Hay arreglos? ¿Por qué no se controla a jueces y fiscales? ¿Puede mejorar el sistema?
Para conocer algunos aspectos de nuestro sistema judicial, enviamos algunas preguntas a Bergés.
-Leyendo el libro uno queda situado frente a una trama cada vez más compleja, una red que parece agigantarse ¿cómo se hace para desarmarla? ¿por dónde empezar?Imagino que sería un proceso muy largo.
-Se trata, en mi opinión, de una cuestión de credibilidad. El proceso puede ser más a menos largo y su duración tendrá que ver puntualmente con la credibilidad de la gente en su sistema de Justicia. La trama no es cada vez más compleja. Es la misma que se va realimentando año a año y gobierno tras gobierno. ¿Cómo se hace para desarmarla? No es nada sencillo. Para empezar, la Corte Suprema de Justicia debe dar su diagnóstico. Con autocrítica, y con sentido de autoridad. A partir de allí, en la Justicia Penal, deberían volver los llamados Fallos Plenarios, y la necesidad de mayor coherencia e igualdad en las decisiones judiciales. Para que el ciudadano perciba que el trato es el mismo para todos. Obvio que no es fácil pero es posible la mejora.
-¿Cómo baja al resto de la sociedad esta "Justicia donde nunca pasa nada"? ¿Cómo repercute?
-El Acá no pasa nada repercute muy negativamente en el ciudadano. Algunos entienden que todo está arreglado, otros están seguros que los poderosos tienen privilegios, y así las opiniones son necesariamente malas. De una Justicia que no da respuestas. Y que carece de eficiencia.
-¿Sólo van presos los "perejiles"? ¿O es un lugar común?
-Entiendo que en Argentina es un lugar común. Hay presos de toda laya. No son perejiles Báez, o Jaime o De Vido. O Fontanet o María Julia Alsogaray, etc. El problema es que en ocasiones, se detiene a personas para lograr un impacto mediático. Para que la ciudadanía crea que se va a fondo cuando lo que se hace es imponer penas anticipadas y permite que las personas, después de una detención, pida primero otra y después la exija.
-¿Vivimos en un estado cercano a la anomia en estos días? ¿Están las normas difusas en la vida cotidiana?
-No me parece. En mi opinión las personas saben cuáles son las normas. Y hay normas, leyes y reglamentos para todo, más allá de algunas lagunas. La anomia es la carencia de normas. El inconveniente en Argentina es que, ante la falta de eficiencia de la Justicia, cada cual se considera con derecho para hacer lo que le plazca. En el entendimiento que, como habitualidad, no pasa nada.