Un proyecto innovador está arrojando resultados positivos en Villa Carlos Paz. En la ciudad serrana, entrenan a perros mestizos para que brinden asistencia terapéutica a personas con discapacidad, ataques de pánico y adultos mayores.
El entrenamiento se realiza en los caniles municipales y y facilita el proceso de adopción de los animalitos rescatados de la calle. De 15 perros entrenados, 10 fueron entregados en adopción a diferentes familias.
«Anteriormente, los perros se iban con las familias pero luego los devolvían, porque no tenían un tratamiento conductual. Ahora es diferente, porque no es lo mismo adoptar un perro que se porta mal que un perro equilibrado. Se hace una evaluación conductual a los perros y a los adoptantes, por el tipo de perros que podrían llegar a adoptar, para tratar de no equivocarse a la hora de darle un hogar a los canes", indicó Marcelo Silva, entrenador de los animales y el encargado de recibirlos cuando llegan a los caniles, a El Diario de Carlos Paz.
Y agregó: "Después se hace un seguimiento de los perros que coordina Roberto Aliaga. Hay perros que entran accidentados o heridos por maltrato o abandono. Muchos tienen habilidades para convertirse en perros de terapia, por lo tanto se les da esa función, y pueden colaborar en escuelas. Nadin fue la primera perra que preparamos para terapia y ya fue entregada en adopción".
El trabajo de reinserción lleva varios meses y desde hace un tiempo, desde la agrupación se encargan también de brindar charlas educativas a colegios sobre tenencia responsable de mascotas.
"El 80% de los perros que recibimos han padecido una tenencia irresponsable de sus dueños. Hay muchas personas que llevan a pasear a sus animales sin correa o sin bozal, lo cual hace que si los perros atacan por algún motivo a otros animales o personas, irremediablemente los entreguen a los caniles o los abandonen", expresó.
Y continuó: "La Municipalidad de Carlos Paz no es eutanásica, la política general es lograr que los animales reciban un tratamiento para volver a ser adoptados por otras familias o que tengan fines positivos".
La experiencia es muy positiva. Algunos animales fueron llevados a escuelas especiales para que compartan juegos con niños que presentan alguna discapacidad y se lograron grandes avances.