Un ciudadano de origen chino fue víctima de una estafa por parte de una empleada judicial en Córdoba, que ahora fue desenmascarada por la Justicia Federal, y le permite al damnificado obtener su ciudadanía argentina. Una especie de "cuento chino", que por suerte tiene final feliz.
La Cámara Federal de Córdoba ordenó este jueves que se restablezca la ciudadanía argentina a un supermercadista chino que había renunciado a su nacionalidad de origen, pero que finalmente se quedó sin ninguna de ellas por una maniobra delictiva llevada a cabo por una empleada judicial.
Fuentes judiciales informaron que la medida, que benefició a Wei Jia (de 50 años), implica que el juez federal Ricardo Bustos Fierro debe permitir que el damnificado recupere la nacionalidad o realice un nuevo trámite, luego de negárselo en primera instancia.
Sueño argentino. Todo comenzó en Córdoba en 2006 cuando Wei, al igual que otras decenas de chinos, renunciaron a la ciudadanía de su país, donde no se permite la doble nacionalidad, para poder obtener la argentina. Pero luego de 10 años, el Ministerio del Interior detectó que había habido una maniobra irregular y se la quitaron, por lo que todos esos ciudadanos no son ni chinos ni argentinos desde entonces.
De hecho, en el caso de Wei hasta llegó a ser detenido y debió pagar una fianza de 100.000 pesos para ser dejado en libertad.
Posteriormente, se detectó una maniobra por parte de una empleada de la secretaría electoral del juzgado de Bustos Fierro, Olga Liliana Borneo Santillán, quien tenía a su cargo en forma exclusiva la gestión de los expedientes de carta de ciudadanía en Córdoba.
De acuerdo con el fallo que la condenó, Borneo Santillán en muchos casos falsificó la firma del juez y hasta la de un fiscal, por lo que recibió una sentencia de tres años de prisión en suspenso por los delitos de supresión de documento público, falsificación de documento público y partícipe necesaria de falsedad ideológica.
Esto derivó en que la Justicia considerara que las cartas de ciudadanía elaboradas por la empleada no tenían validez, entre ellas las del supermercadista de origen chino.
Ciudadano argentino. En representación de Wei, la abogada Déborah Huczek interpuso una petición solicitándole al juez Bustos Fierro que dejara sin efecto la anulación de la carta de ciudadanía dispuesta en su perjuicio.
La letrada explicó que el hombre “fue víctima de la maniobra de una empleada judicial” y que además, por la ley vigente, le correspondía acceder a la condición de ciudadano argentino, sobre todo teniendo en cuenta la situación en la que se lo había colocado a causa de esta anulación.
