Instituto y Quilmes empataron 1-1 en un apasionante partido que abrió la octava fecha de la Primera Nacional. El Monumental de Alta Córdoba y la fría noche de este jueves son testigos de un increíble encuentro.
Instituto arrancó mejor el partido, con mayor decisión, controlando la pelota y dejando a Quilmes sin opciones. Es más, el conjunto de César Zabala fue el que creo las primeras opciones de peligro.
Tanto iba el cántaro a la fuente que al final se le dio. Iban 34 minutos del primer tiempo cuando luego de una gran jugada, el árbitro Andrés Merlos cobró falta. El que se hizo cargo fue Emiliano Endrizzi quien remató y provocó una floja respuesta del arquero Marcos Ledesma.
El rebote lo tomó Facundo Agüero que cabeceó y por el segundo palo apareció el goleador Mateo Bajamich para poner, de cabeza, el 1-0 parcial y llegar a su quinto gol en la Primera Nacional.
El gol pareciera que despertó a Quilmes que comenzó a acercarse con mayor peligro al arco defendido por Germán Salort. En una de las últimas del primer tiempo la Gloria se salvó con lo justo gracias a una atajada de Franco Flores. Y en esa jugada el arquero albirrojo se lesionó.
Aún así, en el segundo tiempo Zabala no metió ningún cambio y al minuto lo sufrió. Es que el delantero del Cervecero, Leandro González, que había errado su situación en el primer tiempo, remató de lejos, Salort parecía que lo tenía controlado pero se le escapó de las manos y fue el 1-1.
El arquero inmediatamente se tomó el hombro y enfilo directo al banco de suplentes. En ese momento ingresó Lautaro Petruchi quien debutó en la Gloria.
Esa acción pareció golpear el ánimo del local que se quedó en el campo de juego y empezó a ver cómo se le venían los dirigidos por Leonardo Lemos. Incluso Merlos anuló un gol de Zabala que había ingresado en Quilmes. Bajamich y Estigarribia también tuvieron dos claras para ponerse en ventaja.
La Gloria quedó con 12 puntos a tres del líder Sarmiento (15). Mientras que el Cervecero quedó segundo con 14 puntos (tres triunfos y cinco empates) y solo recibió tres goles.