Alegrón para Gustavo Coleoni, quien logró un objetivo largamente buscado: ascender a Primera División como entrenador.
Con Central Córdoba de Santiago subieron por primera vez a la Superliga, tras vencer por penales a Sarmiento de Junin. Y el Sapito lo festjó con baile en el vestuario.
Además, se tomó desquite de la final por el ascenso que había perdido con Iván Delfino, cuando dirigían Santamarina de Tandil y Patronato de Paraná, respectivamente.