Los afluentes permanecen contaminados debido a la inescrupulosa cantidad de residuos que reciben permanentemente y de la mano de los propios seres que habitamos en sus entornos.
Así de simple parece que fuera la conexión entre agua contaminada con basura y la acción humana, una ecuación que lleva años, décadas, y por qué no, hasta siglos.
Lo cierto es que desde la Municipalidad de Villa Carlos Paz a través de la Dirección de Ambiente, Ejido y Desarrollo Sustentable, continúa trabajando en la limpieza de costas del lago, ríos, y balnearios, haciendo hincapié en la recolección de colillas de cigarrillos.
Y para sorpresa de muchos, desde el momento en que se intensificó la campaña de limpieza, hace poco más de un mes, hasta el día de la fecha, a las aguas de los diferentes afluentes le quitaron unas ¡10 mil colillas de cigarrillos!
En este sentido, desde la Dirección de Ambiente de la Municipalidad, Mónica Martínez, expresó: "Estamos trabajando en el plan de mejora de la calidad ambiental del sistema bio-lago, hemos intensificado nuestro accionar respecto de la recolección de residuos que se encuentran localizados en el borde costero de los ríos, el lago, y también dentro del agua".
Respecto a este nuevo sistema implementado desde el mes de diciembre del 2019, la funcionaria especificó que se trata de un método basado en "redes colocadas como previsión del afloramiento de algas y que está sirviendo como contención de la basura, ya que en esos puntos estamos juntando aproximadamente 350 kilos de residuos por día que equivalen a más de 70 bolsas de residuos", detalló.
Durante el proceso, desde el Municipio le prestaron atención al tipo de desechos que se generan, identificando a las colillas de cigarrillos como primordiales para el reconocimiento del impacto que generan tanto para el agua en su efecto contaminante como en el caso de otras zonas de la ciudad, en cuanto a su riesgo respecto de incendio.
"La colilla tiene un efecto ambiental muy elevado y el demostrar la cantidad que juntamos nos hace tomar conciencia y reeducarnos respecto de la necesidad que las colillas estén en los cestos adecuados para su deposición final. Desde el mes de diciembre que se comenzó con esta iniciativa, ya se juntaron más de 10 mil colillas", completó Martínez.
Por último, aseguran que el objetivo de esta campaña no es tan solo quitar de estos espacios los elementos contaminantes, sino que se busca concientizar a la población sobre los peligros que significa para el ambiente y la salud, arrojar todo tipo de residuos en las zonas cercanas a los cursos de agua y áreas protegidas.
Cabe mencionar, que una colilla de cigarrillo contamina entre 50 y 70 litros de agua dulce y tarda una década en degradarse, e incluye compuestos como acetona, amoníaco, arsénico, polonio, entre otros. Además de constituir un grave problema ambiental, también como desencadenante de incendios forestales.
