"Hambre, desigualdad social y la eterna pelea contra la concentración de la riqueza" es preocupación de la organización territorial "La Esperanza" CTA-A, en un contexto de ajuste en todo el país con un aumento brutal y exponencial de la pobreza que se ve reflejado fuertemente en los niños y adolescentes".
Según datos de la UCA el 60 % de los menores de 18 años son pobres. "Esta realidad nos plantea un presente de total desolación y abandono para los jóvenes pero también un futuro desesperanzador.
Sumado a esto el aumento de la desocupación y la falta de creación de trabajo genuino termina siendo un combo mortal para las familias argentinas, santacruceñas y caletenses dejando a la suerte de este sistema a miles y miles de personas sin posibilidad alguna de garantizar las necesidades básicas en sus hogares si es que lo tienen”, sostienen.
Decisión
"Ante esta realidad nosotros, lejos de ser cómplices o simples testigos de esta situación, es que hemos tomado la fuerte decisión de construir organización popular donde existe una necesidad, entendemos que la solución a un sistema de exclusión y desigualdad social no es el individualismo o el sálvese quien pueda sino todo lo contrario, es necesario empezar entre pares a construir colectivamente poder popular para revertir una realidad que duele y que se siente en cada barrio de nuestro pueblo", expresa el comunicado.
Además, consideran que "estamos convencidos que en un país que produce alimentos para 400 millones de personas y en una provincia tan rica en recursos naturales, es un crimen que existan familias que no tengan garantizado el plato de comida en la mesa de su hogar, es por eso que afirmamos que la discusión no es sobre la pobreza sino sobre la concentración de la riqueza y la falta de su distribución". Indican que "no vamos a entrar en la falsa discusión de la pobreza por que terminan estigmatizando a los pobres, discriminándolos, reprimiéndolos, siendo rehenes de los malos políticos que destruyen las creencias y la convicción.
Aunque duela, el hambre existe y ningún gobierno ni operativo mediático ‘berreta’ va a opacar la firme decisión de esta organización ‘de organizar’ a los sectores populares y su firme determinación de luchar por una sociedad más justa y equitativa donde todos y todas tengamos garantizados un piso mínimo de derechos para por vivir dignamente”.
Finalmente aseguran que “creemos que lo produce y provoca transformaciones no es el odio sino el amor y la esperanza”.