El Área de Educación Ambiental, comenzó con el programa de Capacitación de Manejo de Residuos Sólidos Urbanos, destinada al sector docente de la localidad, con charlas en modalidad virtual atendiendo la presente situación relacionada con la COVID-19.
Se parte del objetivo de establecer una campaña de colaboración con los docentes para fomentar el reciclaje y separación en origen, y desde el rol que los mismos educadores pueden cumplir en la educación de los alumnos para el manejo de los residuos sólidos urbanos, con capacitaciones accesibles y apropiadas para la edad de cada asistente.
Estas charlas son dictadas por la Ing. Marisol Espino Penilla (Máster en Turismo, Medio Ambiente y Sociedad de la Universidad de Wageningen en los Países Bajos). Los establecimientos educativos que estén interesados en sumarse a la campaña deberán contactarse con la Municipalidad para coordinar las fechas y horarios de las charlas virtuales.
La gestión integral de los residuos sólidos urbanos
La Municipalidad de El Calafate trabaja en tres infraestructuras principales sobre el manejo de los residuos sólidos urbanos, el primer lugar es el Centro de Acopio "Eva Poulsen", el cierre técnico del basural a cielo abierto y el nuevo Centro Ambiental.
En el centro de acopio, donde se juntan todos los materiales reciclables, comenzó con los miércoles de cartón, en primer lugar con los comercios y luego ya con la participación de los vecinos en los barrios, donde se sumaron las latas, plásticos, vidrios y todo tipo de material que tiene valor de recuperación y que puede ser reintegrado a la cadena de sistema de producción.
El cierre técnico del antiguo basural consistió en aislar los residuos con una cobertura, canalizando los líquidos que genera la descomposición de los materiales para su tratamiento y la colocación de venteo para evitar combustiones espontáneas y que esos residuos no permanezcan expuestos.
Por último, el Centro Ambiental en el cual dentro de ese predio se encuentra el relleno sanitario y el propio centro de tratamiento. En este sentido, la diferencia de un relleno sanitario y el basural que había antes, es que éste es una obra de ingeniería, que cuenta con una protección impermeable que impide el ingreso de los líquidos lixiviados a la tierra y los concentra en una pileta de tratamiento. Además, se optimiza el espacio requerido para la disposición final al compactar los residuos antes de ser enterrados.