Productores de frutas de Río Negro, Neuquén y Entre Ríos repartieron este martes en Plaza de Mayo 30.000 kilos de manzanas, peras y naranjas, en reclamo de respuestas a la difícil situación que atraviesa el sector derivada de retenciones a la exportación, tarifas y costos laborales.
Una fila de casi tres cuadras de largo se formó durante la mañana, en la que jubilados, amas de casa y mujeres con niños en sus brazos esperaban su turno para recibir poco más de un kilo de frutas cada uno.
"Hemos venido a mostrar las crisis, el quebranto que tiene el productor ante una producción que le está costando casi $11,20 y está recibiendo alrededor de $6,30 en promedio al año", explicó Sebastián Hernández, presidente de la Federación de Productores de Río Negro y Neuquén.
"Se nos pide (desde el Gobierno), que aguantemos, que aguantemos, que hagamos un esfuerzo, que ya vamos a estar mejor", contó sobre el diálogo con el Estado, una situación que, dijo, "se viene repitiendo desde 2009".
"No ha habido una decisión política, gobierno tras gobierno, que solucione la situación del productor", manifestó Hernández.
Los productores quieren debatir con el Ministerio de Producción la quita o la reducción de las retenciones que comenzaron este año, y la baja de los reintegros, que representan 11 centavos de dólar de pérdida por kilo de fruta.
Asimismo, el dirigente sostuvo que las medidas tomadas hasta ahora por el Gobierno "no han dado efecto", y remarcó que la devaluación del año pasado les fue perjudicial, al suceder "en un momento donde la cosecha ya se había levantado y vendido".
Hernández explicó que la brecha entre los costos y las ganancias se extendió este año y la ubicó en seis pesos de pérdida, una cifra superior a los dos pesos que tuvieron en 2018.
En diálogo con TN, Javier Silvestri (uno de los productores que participaron de la protesta) dijo que en los mercados les pagan $10 por kilo de mandarina, por ejemplo. De ese número les quedan tan solo entre $3 y $4, por productos que en las verdulerías se ofrecen desde $30 a $40.