Una revista de salud de Brasil publicó las investigaciones realizadas en Río Negro y otras provincias patagónicas a partir del brote de hantavirus en Epuyén para avanzar en protocolos comunes para enfrentar la enfermedad viral. "Hantavirus: una patología de baja prevalencia y alta mortalidad" es el título del artículo publicado por la Brazilian Society Of Tropical Medicine que se puede leer en castellano, portugués e inglés.
El artículo del director médico del Hospital Ramón Carrillo de Bariloche, Fernando Tortosa menciona los avances que se abordaron en el primer Congreso Patagónico de Hantavirus a fines de mayo en la ciudad andina, con representantes del sur del país y de Chile. "Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la tasa de mortalidad de esta enfermedad es del 38% y no existe tratamiento, cura o vacuna para la infección", explica la publicación.
También dio cuenta de que "en Brasil, entre 2007 y 2015 se reportaron 13.181 casos de la enfermedad, de los cuales 8% fueron confirmados y hubo 410 fallecidos". En Argentina, entre 2013 a 2018, se registraron un promedio de 100 casos anuales de hantavirus y alrededor de 111 murieron por la enfermedad.
En relación al Congreso Patagónico de Hantavirus donde se analizaron las diferentes etapas del abordaje de la enfermedad, la publicación destacó que "se preparó un documento de consenso entre las partes que incluye recomendaciones transparentes de alta calidad metodológica que se utilizarán para tomar decisiones".
Durante el brote en Epuyén, el hospital Ramón Carrillo de Bariloche indicó que el antiviral "Rivabirina" se brindó a tres pacientes en la etapa temprana de la enfermedad, mientras que el hospital de Esquel dio la droga a los últimos cuatro pacientes del brote que fueron diagnosticados con el virus. En todos estos casos, la evolución fue favorable y ninguno pasó a terapia intensiva.
De acuerdo con la publicación médica la Rivabirina "es un antiviral recetado para combatir enfermedades como la hepatitis. Hasta el momento no hay recomendaciones globales para su uso en casos de hantavirus, ya que no hay evidencia científica que respalde su uso. Sin embargo, el hecho puede proporcionar a las autoridades una posible investigación sobre el tratamiento de esta condición en ausencia de un medicamento específico para combatirla". Según publicó Río Negro.
