Un freezer se descompuso y para no desperdiciar las dosis de vacunas refrigeradas se organizó una vacunación de emergencia a medianoche. El hecho ocurrió este viernes en Seattle, en el estado de Whashington.
El congelador que presentó la falla técnica almacenaba 1.650 dosis de la vacuna contra el coronavirus de Moderna, por lo que la cadena de frío se vio comprometida. De momento, se desconoce que causó la problemática.
Las dosis fueron aplicadas en varios centros sanitarios de la ciudad a miles de personas, que conocieron la noticia través de redes sociales y se acercaron a los establecimientos médicos. La única solución era aplicarlas lo antes posible, por lo que los ciudadanos llegaron en pijama y bata.
De manera salomónica se repartieron las dosis. Unas 880 fueron para un centro de vacunación y 770, para otro. En ambos casos, se organizaron largas filas, en el marco de las medidas preventivas para evitar la propagación del virus.
En pocos minutos, más 150 voluntarios comenzaron a vacunar a las largas columnas de personas que se acercaron a los centros vacunatorios. “Mi hijo me llamó y me dijo: ‘Mami, tenemos turnos a la 1. Me abrigué y salí así. Ahora vuelvo y puedo seguir durmiendo”, aseguró una de las vecinas en diálogo con los medios locales.
El director de operaciones de la organización ‘Swedish’, Kevin Brooks, le aseguró a la cadena de televisión NBC que “ninguna dosis se desperdició”. La información fue confirmada por la Asociación de Hospitales del Estado de Washington, que informó al Departamento de Salud del Estado de Washington los nombres de todas las personas vacunadas este viernes para que reciban la segunda dosis.
Con información de Europa Press.