César y Griselda se separaron luego de estar juntos por 14 años, por los ataques de celos que, según ella, su marido tenía. La situación vivida posteriormente no hizo más que revalidar su pensar.
Con el objetivo de espiarla, el hombre cavó un túnel con sus propias manos debajo de su casa. Sin embargo, no todo salió como esperaba, quedando atrapado en el pozo. Quien lo descubrió y llamó a la policía fue precisamente su ex cónyuge, al escuchar ruidos extraños seguidos de la voz de César.
Los efectivos lograron retirar al hombre del estrecho pasillo que había realizado, aunque no fue fácil. Francisco Javier Carrillo Ruiz, director de Protección Civil y del cuerpo de Bomberos, expresó que tardaron más de 45 minutos y que tuvieron que sacar grandes cantidades de tierra para liberar al sujeto.
Además de encontrarse débil, los medios locales detallan que César mostró un cuadro de deshidratación severa y una probable intoxicación. También fue citado ya por el ministerio público, por incumplir con la orden de restricción que le había sido impuesta.