El futbolista Pablo Álvarez habló por primera vez tras la muerte de su esposa por cáncer de mama

El defensor de Racing contó cómo sobrelleva este momento junto a sus hijos.

El futbolista Pablo Álvarez habló por primera vez tras la muerte de su esposa por cáncer de mama
Pablo u00c1lvarez, de Racing

Pablo Álvarez, defensor de Racing, habló con Diario Olé por primera vez desde la muerte de su esposa, Anabel Balzano, quien falleció hace un mes a causa de un cáncer. "Es difícil, es difícil seguir. Pero bueno... Primero y principal, me siento un privilegiado por poder laburar de lo que amo", dijo.

"Ella lo sabía desde el primer momento que estuvimos juntos y yo no era nadie en el fútbol. Pensé también en largar todo durante su tratamiento para estar a su lado, pero ella me cagó a pedos y me dijo que siguiera", reconoció el exjugador de Central.

Luego, se refirió al difícil momento que atraviesa junto a sus dos hijos: "No lo entienden mucho, son chiquitos. Alina tiene ocho años y Felipe, cinco. La nena vio todo el proceso, se dio cuenta de cómo su mamá se iba deteriorando. Tampoco hay que ser hipócritas: venía haciendo un duelo interno, aunque obviamente que nadie está preparado para una situación así de extrema".

"Cuando vuelvo a casa tengo dos soles que me llenan de energía para seguir peleándola. Me dan las fuerzas, me debo a ellos. Son dos cositas que ella me dejó. Ellos dos son ella. Y al chiquito le encanta jugar al fútbol. ¿Cómo no se me va a caer la baba y no voy a querer seguir adelante? Por más que esté hecho mierda, o me tenga que encerrar en una pieza a llorar, cuando salgo de ese cuarto inmediatamente veo a ellos y me hacen reír", agregó.

Por último, agradeció el apoyo de sus colegas y compañeros: "La verdad, me sorprendieron para bien. Uno, a lo largo de toda esta carrera en la que ya no soy un pibe, es conocido en el ambiente. Lo que sembré empezó a verse. Pese a que a varios no los conocía desde hacía mucho tiempo, que mis compañeros estuvieran conmigo en ese momento, incluso en el velatorio, me dio orgullo".