Luego de la marcha de la CGT, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, abrió la cumbre "Argentina Summit 2017" y se refirió a la gestión del Gobierno.
"Este proceso de cambio que empezó hace 15 meses tiene que ver más con las esperanza que con la paciencia. Hay una parte minoritaria que estaba en contra de este cambio, pero la mayoría de la sociedad quiere que esto funcione y pone el hombro con mucho esfuerzo y sostiene un proceso de esperanza", resumió el jefe de Gabinete.
Y rápidamente, el discurso giró hacia la herencia. "No hubo un ocultamiento, hubo un programa sistemático de mentira. Se vuelve muy difícil discutir la verdad. Si bien hay más institucionalidad, está el reflejo de que todo es discutible", agregó.
"Sentimos que el disenso no atenta contra la gobernabilidad", remarcó Peña, quien subrayó que las tensiones que existen dentro del sindicalismo "comparten una visión más parecida a la de la ex presidente Cristina Kirchner". Y añadió: "Esta tensión en un año electoral estará presente".