A los millennials, hoy ya jóvenes independientes, les importa la conciencia ambiental. Y las estadísticas lo comprueban. Según un estudio de Morgan Stanley realizado en Estados Unidos en 2018, entre inversores individuales, el 86% de los millennials se mostraron entre algo o muy interesados en inversiones relacionadas con los negocios sustentables.
La generación Y, también llamada millennial, que abarca a quienes nacieron entre 1980 y 2000, acompaña el crecimiento de la sustentabilidad, un concepto que impacta directamente en la forma de hacer negocios de miles de compañías, con un enfoque mucho más responsable.
El interés se enfoca específicamente en el desempeño de una empresa expresado en tres dimensiones: social, económica y ambiental. La generación Y, según este informe, invirtió en compañías con objetivos sociales y ambientales dos veces más a menudo que la población total de inversores individuales.
El Focal Point de Finanzas Sustentables de Fundación Vida Silvestre para la red WWF, Pablo Cortínez, explica: "La creciente preocupación por el cuidado del ambiente tiene su correlato en una mayor demanda de productos y servicios sustentables por parte de quienes se muestran más sensibles al deterioro de nuestro planeta. Este grupo de consumidores, si bien aún minoritario, es cada vez más numeroso, y exige productos y servicios que no sólo se 'pinten de verde', sino que realmente sean producidos de manera sustentable, y que esto, a su vez, sea contrastable".
Una encuesta a cargo de la consultora Nielsen apoya esta idea y aporta más datos. Dos de cada tres consumidores finales se mostraron predispuestos a pagar más para adquirir productos fabricados por empresas socialmente responsables, mostrando un incremento del 47% en cuatro años. De hecho, mientras menor es la edad del encuestado, mayor es el interés por esta temática.
Según este relevamiento, Argentina ocupa el último puesto entre los siete países encuestados en la región, mientras que los que encabezan el ranking son países de Asia. Es así como la generación que actualmente representa el 30% de la población latinoamericana y el 22% de la argentina, se sigue imponiendo como la más comprometida a nivel sustentabilidad, lo que marca un nuevo perfil de consumidor e inversor.