Alemania prohíbe la venta de relojes inteligentes para niños

La agencia nacional de telecomunicaciones del país europeo teme que los dispositivos puedan ser utilizados para espionaje.

Smartwatch (Web)
Smartwatch (Web)

La agencia nacional de telecomunicaciones de Alemania prohibió este viernes la venta de relojes inteligentes para niños y aconsejó a los padres que destruyan cualquier dispositivo que tengan actualmente.

Los relojes fueron clasificados por la agencia como "dispositivos de escucha prohibidos", y advirtieron a los padres que podrían ser utilizados para escuchar a sus hijos sin su consentimiento.

Si bien la agencia no hizo mención a las preocupaciones de seguridad, el anuncio se produce a casi un mes de que la Organización Europea del Consumidor (BEUC) emitiera un informe que menciona preocupaciones de privacidad y seguridad con muchos de los fabricantes de smartwatch.

En su informe, publicado el mes pasado por el Consejo Noruego del Consumidor, el BEUC advirtió a los padres que estos dispositivos pueden tener vulnerabilidades que podrían hacer más sencillo el robo de datos o el pirateo del dispositivo. La organización incluso descubrió que uno de los relojes inteligentes proporcionaba información de ubicación no encriptada a servidores en China.

Los dispositivos inteligentes para niños, como los relojes inteligentes, las cámaras y otros juguetes, son dispositivos habilitados para Internet que capturan y transmiten datos a terceros. Los relojes utilizan con frecuencia cámaras, micrófonos y rastreadores GPS para permitir que los padres sigan a sus hijos en tiempo real. Sin embargo, si estos datos no se transmiten o almacenan adecuadamente, los atacantes podrían usar esta información para rastrear y contactar a niños sin el consentimiento de sus padres.

En los Estados Unidos, el FBI advirtió que los dispositivos inteligentes de los niños pueden "registrar y recopilar conversaciones al alcance del oído del dispositivo. Información como el nombre del niño, la escuela, lo que le gusta y lo que no le gusta, y esas actividades se pueden divulgar a través de una conversación normal con el juguete o en el entorno.

El FBI insta a los padres a usar los dispositivos con precaución y examinar los acuerdos de los usuarios y las prácticas de privacidad, así como saber dónde se almacenarán sus datos. También insta a los padres a asegurarse de que los dispositivos estén apagados cuando no estén en uso.