El líder de la mafia italiana, Salvatore "Totò" Riina, murió este viernes por la madrugada a los 87 años en el área para detenidos de un hospital de Parma mientras cumplía una pena de 26 cadenas perpetuas.
"Toto", nacido en Sicilia en 1930, estaba acusado de la muerte de unas 100 personas, incluidas las de Piersanti Mattarella, entonces presidente de la región de Sicilia y hermano del actual presidente italiano Sergio, en 1980.
El capo de la Cosa Nostra estaba detenido en una cárcel parmesana desde 1993 bajo el régimen del denominado "artículo 41 bis", que prevé aislamiento y condiciones de rigurosidad para impedir el posible contacto con miembros de las organizaciones mafiosas desde la prisión.
Riina estaba en coma farmacológico desde hacía algunos días, tras dos operaciones a las que había sido sometido por una enfermedad que sufría hace tiempo, y el ministro de Justicia itailano Andrea Orlando había firmado un permiso para que la familia lo pudiera visitar en el área especial para detenidos.
Aún en cárcel, era considerado el jefe de la mafia y estaba todavía imputado en un proceso que investigaba las relaciones mafia-Estado, pero por su salud seguía las audiencias por videoconferencia.
Riina había sido encarcelado el 15 de enero de 1993 acusado de haber ordenado los homicidios de los jueces antimafia italianos Giovanni Falcone y Paolo Borsellino un año antes. Hasta entonces, en 63 años, Riina nunca había dejado Sicilia.