El juicio oral a la vicepresidenta Cristina Kirchner, al exministro de Planificación Julio De Vido y al empresario Lázaro Báez, entre otros, por supuesto direccionamiento de la obra pública en Santa Cruz se reanudó de manera semipresencial con planteos de nulidad por parte de las defensas de algunos de los acusados.
El debate, suspendido desde de el 17 de marzo pasado a raíz de la pandemia de coronavirus, comenzó a las 9.30 con los tres jueces del Tribunal Oral Federal 2 presentes en una de las salas de audiencias de Comodoro Py 2002, junto a un secretario y con todas las partes y algunos de los acusados conectados a través de la plataforma Zoom.
El presidente del Tribunal, Jorge Gorini, abrió la audiencia desde la sala B ubicada en la planta baja de los tribunales federales de Retiro y, de inmediato, comenzaron los planteos contrarios a la modalidad de juicio remota.
"Nuestra presencia por este sistema no significa convalidar absolutamente nada", comenzó el abogado Mariano Fragueiro Frias, defensor del extitular de Vialidad de Santa Cruz Héctor Garro.
Fragueiro Frías remarcó que nunca se opuso a la reanudación del juicio sino que pretende se lo autorice a estar físicamente presente en la sala de audiencias, por lo cual hizo reserva de recurrir en un futuro a la Cámara Federal de Casación.
"No consentimos con nuestra presencia absolutamente nada de lo que se va a hacer y no convalidamos el sistema semipresencial", argumentó el defensor Fragueiro.
A su turno, el abogado del exfuncionario Carlos Kirchner, Enrique Arce, cuestionó la decisión del Tribunal de reanudar las audiencias de manera semiremota, estimó que el plazo durante el cual puede suspenderse un juicio oral estaba excedido y planteo la nulidad.
"Lo que se está llevando a cabo se da de bruces con la ley procesal, me fastidia que nos muteen y conviertan el procedimiento oral en un procedimiento escrito y encima por chat. No sé si la próxima voy a tener que poner like", ironizó Además, cuestionó la presencia física de los testigos en la sala de audiencias del Tribunal en Comodoro Py 2002.
"Qué pasa si un testigo en el ámbito de la citación es contagiado de Covid en el ámbito del tribunal y luego fallece? No es improbable que suceda", planteó.
El fiscal de juicio, Diego Luciani, se opuso al planteo, pidió rechazarlo y remarcó que las audiencias son orales y que el Tribunal, "aún poniendo en riesgo su salud", resolvió realizarlas con presencia física en la sala de audiencias al igual que los testigos citados para cada jornada.
Para la audiencia fueron citados dos testigos propuestos por una de las defensas.
En total, se conectaron de manera remota unas 50 personas, entre ellas el defensor de la ex presidenta y actual vicepresidenta Kirchner, Carlos Beraldi, y acusados como José López, Abel Fatala y Nelson Periotti.
En la causa se juzga el presunto direccionamiento del 80 por ciento de la obra pública nacional en Santa Cruz a empresas del detenido Lázaro Báez, principalmente "AustralConstrucciones" y supuestos sobreprecios durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.