El escándalo de los huevos contaminados con fipronil llegó a 17 países europeos y Hong Kong, en china, según informó este viernes la Comisión Europea (CE), que precisó que, solo en Holanda, Bélgica, Alemania y Francia, se confirmó la comercialización de huevos con trazas del insecticida.
Los otros 13 países recibieron huevos procedentes de las granjas afectadas en esas cuatro naciones, cuya producción fue bloqueada, pero no se confirmó la presencia de fipronil en los mismos, subrayó el portavoz comunitario Daniel Rosario, durante la rueda de prensa diaria de la CE.
Se trata de Suecia, Francia, Reino Unido, Austria, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Polonia, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia y Dinamarca, así como Suiza y Hong Kong, según las últimas notificaciones al sistema europeo de alerta rápida (Rasff).
"Sabemos que estos países recibieron huevos producidos en las granjas que fueron bloqueadas en Holanda, Bélgica, Alemania y Francia", añadió Rosario.
La CE detalló que la reunión anunciada para abordar el caso se celebrará el próximo 26 de septiembre, a petición del comisario europeo de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis.
"No es una reunión de crisis", dijo la portavoz comunitaria Mina Andreeva, quien insistió en que el objetivo del encuentro será "sacar lecciones" de este suceso, que puso en tela de juicio los sistemas de alerta de seguridad alimentaria en la Unión Europea (UE).
No obstante, Andreeva adelantó que "es demasiado pronto para decir ahora cuales son las lecciones aprendidas".
Aunque la comercialización del fipronil está permitida en la UE, su uso es ilegal en la cadena alimentaria, por lo que "hay una dimensión judicial" en el caso.
"Estamos frente a la utilización ilegal de un producto que no debería haberse usado en estas circunstancias", afirmó Rosario, y recalcó que "la UE tiene uno de los sistemas más avanzados de seguridad alimentaria".