La provincia de Buenos Aires quedó al borde del default porque todo indicaría que no logró el consenso necesario para prorrogar hasta el 1 de mayo el pago de un vencimiento de capital previsto para el 26 de enero: la fecha para lograr ese acuerdo vence este miércoles y el comité que agrupa a los acreedores privados emitió un duro comunicado para rechazar la propuesta.
“La provincia ha llevado a cabo la solicitud de consentimiento en un plazo truncado, sin el beneficio de un proceso formal de identificación de tenedores de bonos, y sin un plan integral", advirtió el comité de bonistas internacionales que representa a los tenedores con posiciones en títulos bonaerenses.
Más allá de las críticas contra la administración de Axel Kicillof por la forma en la que se encararon las gestiones para conseguir la adhesión necesaria para postergar los vencimientos, desde el comité de inversores aseguraron que siguen listos para "entablar negociaciones de buena fe sobre la base de un plan económico sólido e integral".
El texto que difundieron acreedores extranjeros con posiciones en el bono Buenos Aires 2021 (BP21) complicó las gestiones que la administración provincial tendrá que acelerar en lo que resta del día para tratar de convencer al menos el 75 por ciento de los tenedores para postergar hasta el 1 de mayo el pago de 249 millones de dólares.
La postura que los acreedores hicieron pública en las últimas horas, y que publicó Infobae, desarmó las expectativas de del gobernador Kicillof, quien días atrás aseguró que "los acreedores entienden bien la solución que le presentamos" porque, explicó, "este año la provincia tiene 2.900 millones de dólares de vencimientos de deuda".
“Nosotros aclaramos que hay cuestiones y prioridades que vamos a atender, porque no dejaremos a los sectores que la están pasando tan mal sin alimentación, sin cuestiones básicas y con las escuelas rotas", advirtió el gobernador.
El martes, el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, respaldó la posición de la provincia de Buenos Aires y apeló a la "voluntad" de los bonistas para colaborar en la búsqueda de una solución.
"Esperamos que la provincia de Buenos Aires se mantenga en su posición, y que los bonistas tengan voluntad de encontrar una solución ordenada porque de lo contrario se van a perjudicar todas las partes", precisó Guzmán.
El funcionario destacó que "en estos momentos la provincia de Buenos Aires enfrenta un vencimiento de capital que es anterior a la fecha en que se estima resolver el problema de la Nación de forma responsable, prudente y coordinada con la Nación".
Por ello, justificó el pedido de tiempo que el gobierno bonaerense le ha formulado a los bonistas, y recordó que la provincia "continúa pagando intereses, pero lo que pide es prolongar un vencimiento de capital del 26 de enero para mayo, de modo de permitir que la Nación tome la iniciativa en este proceso y que la provincia de Buenos Aires vaya detrás".
Explicó que "de nada serviría hacer un salvataje por parte de la Nación de US$ 250 millones para la provincia para el 26 de enero", dado que ello "violaría el principio rector que estamos llevando a cabo que es la sostenibilidad".
"Le estamos pidiendo a los bonistas que nos den el tiempo necesario para resolver un problema de descalabro macroeconómico que ha afectado a todo el país", dijo Guzmán, y señaló como necesario resolver ese problema "para tener las condiciones para poder crecer para poder salir de forma ordenada".
"En la medida en que el país crezca la capacidad de pago se recuperará", concluyó el ministro de Economía.
Por la corresponsalía de Buenos Aires.