El Supremo Tribunal Federal de Brasil analiza desde el jueves la constitucionalidad de apresar a un condenado en segunda instancia, debate que puede durar varias audiencias, y del cual podría depender la excarcelación del expresidente Lula da Silva, condenado por corrupción en la causa Lava Jato.
El titular del Supremo, Antonio Dias Toffoli, anunció que en la sesión que comenzó ayer hablarán abogados que defienden las tesis a favor y contra el arresto tras la segunda instancia, el procurador general de la República y el ministro del Supremo Celso de Mello, relator del caso.
Pero la exposición y votación de los once jueces del Supremo será la semana que viene.
Enun debate previo, el juez Luiz Fux dijo que si se anula el régimen en vigor, que permite el arresto, significará un "retroceso".
La decisión que adopte la más alta Corte trasciende lo estrictamente judicial porque cualquier veredicto tendrá consecuencias políticas.
Si se confirma la prisión en segunda instancia, sin aguardar las otras dos posibles apelaciones, será una victoria para los responsables de Lava Jato, en especial el exjuez Sergio Moro, actual ministro de Justicia y Seguridad Pública.
Si vence la tesis que no permite arrestar a un condenado hasta cumplir las cuatro fases apelatorias, permitirá la excarcelación de Lula, y será una victoria política para el exmandatario condenado por corrupción y lavado de dinero.
No se descarta, además, que tal como lo anticipó Dias Toffoli, haya una "modulación" en la aplicación del parecer para que sus consecuencias políticas sean menos conmocionantes en un país que también parece dividido sobre el tema.
Ayer Dias Toffoli y otros dos jueces del Supremo fueron hasta la residencia oficial, el Palacio de Alvorada, para reunirse con el presidente Jair Bolsonaro.
El influyente general Eduardo Villas Boas divulgó una nota en la que dio a entender su preocupación ante un eventual fallo favorable a Lula que podría causar disgusto en la población.
Existe el riesgo de que "el pueblo caiga otra vez en el desaliento o en una eventual convulsión social", tuiteó Villas Boas, que es asesor del Gabinete de Seguridad Institucional del gobierno.