En Juegos Olímpicos o en Mundiales, suele haber imágenes conmovedoras. Ya sea por un logro impensado de un protagonista, por la frustración de una derrota o por errores, como le pasó a la posta femenina china en la final de los 4x100 metros del Mundial de atletismo de Doha 2019.
Seguramente, todos se preguntan que hacían esas dos deportistas corriendo para atrás... en sentido contrario a las demás, a contramano de la lógica y saboteando sus chances deportivas. ¿Se volvieron locas antes de la recta final?
La posta entraba en zona de definición, con cinco países peleando por los tres lugares del podio, entre ellos, China. Se terminaban los terceros 100 metros y faltaba la entrega del testimonio para la carrera hacia la gloria.
Todo transcurría de manera normal hasta que Lingwei Kong se pasó de los límites de entrega del testimonio que debía recibir Manqi Ge, porque esta última tomó demasiada velocidad antes de tiempo.
Mientras las demás atletas seguían su marcha hacia la línea de llegada, las dos chinas frenaron su carrera y empezaron a retroceder, envueltas en la desesperación, buscando el lugar exacto donde cumplir con el pase del implemento.
La historia concluyó con la posta china descalificada por infracción al artículo 170.7 del reglamento de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), que trata sobre la entrega del testimonio fuera de los límites establecidos.
Las atletas estaban desconsoladas, en especial Manqi Ge, que lloraba sin poder creer que tantos años de preparación se vieran frustrados por un error tan grosero y poco frecuente.
El oro quedó en manos de Jamaica, con Natalliah Whyte, Shelly Ann Fraser-Pryce, Jonielle Smith y Shericka Jackson, con un tiempo de 41s44/100, marcando un nuevo récord.