Desde el pasado lunes Tucumán ingresó en la etapa de distanciamiento social. Sin embargo en la última etapa de la cuarentena obligatoria, las flexibilizaciones comenzaron y se produjo un cierto relajamiento de la ciudadanía.
Desde Vía Tucumán salimos a consultar a los ciudadanos como vivieron esta etapa inédita de pandemia que estamos atravesando y que piensan de las habilitaciones que se están autorizando de manera paulatina.
"Con muchas complicaciones por el tema del trabajo, con el tema de los hijos que les dan muchas tareas, también hay muchísima gente que no cumple el protocolo de estar a dos metros y hay gente que ya no usa barbijo", comentó una Mario mientras realizaba fila en un local de pagos. Además, añadió con relación a la apertura de bares y restaurantes que, "si cumplen los protocolos que se piden bien, porque supuestamente se sacan turnos y lo hacen por turno, pero me parece bien. Uno cuando sale a hacer trámites siempre busca sentarse en algún bar, hasta el momento se vieron muchos bares cerrados, todavía no están abiertos todos".
Tucumán, actualmente registra 49 casos positivos de coronavirus, todos importados y de acuerdo a la información brindada desde el Ministerio de Salud de la provincia no hay circulación viral.
Un florista de peatonal Muñecas nos comentó que "todos tenemos que trabajar para conseguir el sustento que se necesita, hay gente que debe estar más apretada que otras porque viven de la labor que están haciendo, todos como yo, como cualquier persona, necesitan trabajar para tener el dinero suficiente".
Con relación a los cuidados para prevenir contagios, aseguro que "veo gente con tapa boca, veo gente cumplir con el distanciamiento pero creo que en algunos casos no se da, creo que se debe seguir aprendiendo para poder protegernos".
Diariamente, desde los organismos oficiales insisten con el cumplimiento de las medidas de prevención, las cuales incluyen el uso del tapabocas en espacios públicos, el distanciamiento social y el lavado de manos o en su defecto el uso de alcohol en gel.
Por su parte, la última señora consultada mientras esperaba para pagar sus cuentas, tuvo una visión un poco menos optimista de la situación actual. Susana nos dijo que, "se que todos necesitan trabajar pero no se si está bien porque la gente es muy imprudente, la gente va a querer salir a comer, tomar su café en un bar, pasar la tarde. Está bien por el motivo del trabajo pero no sé hasta dónde llega la prudencia de las personas", cerró.