Lo que podía ser la llegada a un sueño para San Jorge se transformó en todo lo contrario anoche por las incidencias en el partido frente a Alvarado de Mar del Plata debido al polémico arbitraje de Adrián Franklin que derivó en una sentada histórica de protesta del "Expreso" en la cancha en disconformidad con lo que venían sufriendo por las decisiones del juez.
En horas de la mañana el plantel arribó a suelo tucumano y realizaron declaraciones ante la prensa.
"Lo que pasó no se lo deseo a nadie", afirmó David Valdéz, uno de los jugadores expulsados en el cotejo. "Cuando nos sentamos en el campo de juego, se acercaban los jugadores de Alvarado y nos decían que no mereciamos lo que estaba pasando. Se pusieron en nuestro lugar por la angustia y la impotencia que uno siente. El equipo rival se portó muy bien", comentó el jugador con relación a la actitud de los futbolistas locales.
"Se venía hablando apenas se designó el árbitro de lo que podía pasar. Veniamos conscientes de que podíamos sufrir lo que sufrimos pero no pensamos que podía ser tan alevoso como fue", sostuvo el jugador. Además añadió, "teníamos seis faltas cometidas y teníamos cinco jugadores amonestados".
Consultado por sus sensaciones luego de haber tomado la medida para manifestar el descontento con lo que vivó el equipo anoche, Valdéz dijo que "estoy contento y conforme con el club, con el equipo porque se formó un plantel con buenas personas sobre todo".