Mientras se extiende la pelea con el Gobierno provincial, la Nación aceptó un pedido para tomar nuevas medidas frente al narcotráfico en Santa Fe. El Ministerio de Seguridad ampliará la protección a jueces y fiscales federales del distrito por una nueva denuncia de amenazas a funcionarios públicos de Venado Tuerto.
El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Horacio Rosatti, pidió que se refuerce la vigilancia y custodia. La solicitud no no solo se refiere a la situación de la principal localidad del departamento General López, sino también a Rosario, la ciudad capital, Rafaela y Reconquista.
Al margen del conflicto por el proyecto para impulsar el juicio político al máximo tribunal y el debate en el Congreso, Aníbal Fernández accedió al reclamo del magistrado. De esta manera, el Gobierno redoblará esfuerzos para garantizar la actividad en el fuero federal santafesino.
El último fin de semana, Rosatti se solidarizó con Aurelio Cuello Murúa por las amenazas que recibió junto a otros funcionarios de Venado Tuerto. De acuerdo a una denuncia que trascendió el último viernes, al juez le advirtieron que habrá “balas y granadas para todos”.
Las amenazas en el sudoeste santafesino no son inéditas. El año pasado, dirigentes de la Unión Cívica Radical (UCR) advirtieron que había una investigación abierta sobre un plan para balear la casa del intendente Leonel Chiarella.
¿Cómo fueron las amenazas narco a la Justicia federal en Venado Tuerto?
El jueves a la noche, el senador del departamento General López, Lisandro Enrico, recibió un mensaje de Whatsapp que decía: “Ya les avisé a todos que dejen de meter presa a gente inocente”. De esta manera lo amenazaron con dispararle dentro de una lista de víctimas con funcionarios de diversos ámbitos.
El texto mencionaba a Chiarella, la fiscal provincial Susana Pepino, su par federal Javier Arzubi Calvo y a Cuello Murúa. “Están todos metidos en la bolsa, son todos corruptos”, rezaba.
A través de una línea telefónica de Trelew, al legislador de la UCR también le mandaron una foto de una pistola Bersa y agregaron: “Esta es para usted”. A partir de esta comunicación, Enrico decidió recurrir al Ministerio Público de la Acusación (MPA) para investigar el caso.
Si bien los mensajes fueron enviados sin firma, en Venado Tuerto hay un solo sospechoso en la mira. Se trata de Matías Álvarez, que la semana anterior asistió al inicio de un juicio a 21 personas como integrantes de tres organizaciones narcocriminales. El “Negro” o “Bicho” fue mencionado como presunto líder de una de ellas.