Efectivos de la Policía de Santa Fe y Gendarmería Nacional comenzaron este jueves el desalojo de unas 12 familias que desde febrero tomaban tierras situadas en el norte de la capital. De esta manera planean liberar una zona que pertenece a Vialidad Nacional.
La orden para el operativo la dictó el juez federal Francisco Miño y se puso en marcha a las 6 con la presencia de funcionarios municipales y provinciales. Inicialmente no se reportaron incidentes tras el contacto con quienes viven allí.
A principios de año, unas 60 familias se habían instalado en en el predio de barrio Transporte delimitado por las calles 9 de Julio, 4 De Enero, Azcuénaga y Matheu. Allí instalaron casillas y carpas. Sin embargo, con el paso del tiempo, muchos fueron retirándose ante la falta de agua.
Fuentes consultadas por Télam indicaron que el operativo se basaba "en llegar a acuerdos con las personas que están viviendo allí". Representantes de los ministerios de Seguridad, Infraestructura, Desarrollo Social y de la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia asistieron junto a la Municipalidad de Santa Fe.
Voceros del Ejecutivo provincial indicaron que las personas que están ocupando el predio fueron llamadas a reunirse con autoridades para dejar asentado en un convenio las acciones a seguir en relación a su reubicación y ayuda en la transición.
Por esa razón, hasta que no se completen esos trámites las casillas que instalaron en ese lugar no serán removidas.
Se acercaron a los terrenos tomados la interventora de la Unidad Regional Uno de Policía, Marcela Muñoz; el director de Hábitat de la provincia, Francisco Alda; la subsecretaria de Asuntos Legislativos del Ministerio de Gobierno, Marcela Aeberhard; el inspector de la Agencia de Administración de Bienes del Estado, Alejandro Villar; además de autoridades de las secretarías de Habitat y Desarrollo Social del municipio.